Una vez listo el hilado, el paso siguiente es el tejido a mano en antiguos telares siguiendo técnicas ancestrales. Los talleres se encuentran montados en las casas de los tejedores, en el campo, rodeados de naturaleza. El tejido es una práctica ancestral que convive con las actividades rurales diarias de la zona. Todo es parte de la vida rural tradicional, es parte de un todo.
Esta actividad también permite pasar mucho tiempo en familia. De hecho, tejer es una tradición familiar que se hereda y los talleres son muchas veces compartidos por familiares. Las tardes se pasan tejiendo entre mate y mate.
Se tarda aproximadamente entre 12 y 14 semanas en completar una alfombra entera, dependiendo del tamaño y la textura. No hay límites de tamaño para nuestras alfombras.
Nuestra misión es empoderar a comunidades rurales de expertos tejedores y pequeños productores de lana que viven en zonas remotas e inaccesibles de Argentina. Dado que viven en regiones muy aisladas, el acceso a trabajos es realmente escaso y es muy difícil para estas poblaciones obtener un ingreso justo por su trabajo.
Nuestro compromiso es generar un contexto sustentable para que su talento y expertise pueda florecer y expandirse. Estamos comprometidos con la generación de oportunidades en las que se puedan apalancar en el largo plazo y de manera sostenida en el tiempo. Oportunidades que generen progreso para toda la comunidad y generaciones subsiguientes. Que sean el motor de esta economía regional que avanza.
Cada paso en la elaboración de los textiles es realizado manualmente y en comunidad. Buscamos ver progreso en cada uno de estos eslabones, todos tan importantes; desde los criadores de ovejas y llamas que dedican su vida al cuidado de sus animales, hasta los hilanderos y tejedores. En cada paso trabajamos siguiendo prácticas de comercio justo. Esto implica que los precios están basados en los costos; el tiempo y la dificultad que cada trabajo conlleva y no están dictados por el mercado solamente.
Hoy AWANAY alcanza a más de 100 familias entre hilanderos y tejedores en el Monte y en la región de la Puna y los Valles. Estamos muy agradecidos por este vínculo que hemos creado a lo largo de los años, basado en la confianza, la admiración y el afecto. Nos sentimos muy orgullosos por el camino y el progreso que estamos construyendo juntos.
Sólo ofrecemos cambios o devoluciones si el producto está fallado o dañado al momento de la entrega.
Dado que nuestras alfombras están totalmente hechas a mano, es importante saber que siempre existirán diferencias de una alfombra a otra o incluso de una muestra a la alfombra final. Cada alfombra es especial y única. No ofrecemos devoluciones o cambios si la textura o el color es un poco diferente a la muestra o imagen elegida. Estas diferencias son inherentes al tipo de textiles que hacemos. En cuanto al tamaño, por favor considerar una tolerancia del 4% en la medida. En caso de querer aplicar por un cambio por favor contactarnos dentro de los 5 días de recibido el producto a info@awanay.com.ar
AWANAY no ofrece un periodo de garantía. En caso de tener cualquier inconveniente por favor contactarnos y asistiremos. Estamos 100% orientados al servicio y la satisfacción del cliente es prioridad para nosotros.
AWANAY no se hace responsable del uso indebido de la alfombra ni por cualquier daño relacionado al uso de ésta. Tienen la intención de ser utilizadas como decoración para el piso u para otros usos decorativos. Tampoco nos hacemos responsables de las lesiones relacionadas con el uso de nuestras alfombras.
Dado que nuestras alfombras están totalmente hechas a mano, es importante saber que siempre existirán diferencias de una alfombra a otra o incluso de una muestra a la alfombra final. Cada alfombra es especial y única. Estas diferencias son inherentes al tipo de textiles que hacemos.
AWANAY no se hace responsable por daños causados por personas siguiendo las instrucciones de Cuidado y Mantenimiento. Recomendamos consultar con un experto en limpieza de alfombras ante cualquier duda o inconveniente. Tampoco se hace responsable por el mal mantenimiento de las alfombras